Hay casos en los que tenemos que hacernos cargo de un familiar, amigo, o allegado cercano que está pasando por un mal momento y tiene que ser internado debido a algún tipo de enfermedad, o que sufre de alguna covalencia que le impida desarrollar sus tareas cotidianas con la ausencia de otra persona.
Si los tiempos en los que se debe pasar por estas situaciones no son muy prolongados tal vez no surjan demasiados inconvenientes, pero si se trata de algo cuasi permanente o que dure meses o años, es probable de que comiencen a aparecer problemas que van más allá de la enfermedad propiamente dicha. Para empezar, no se trata de desvincularse de la responsabilidad de hacerse cargo de los cuidados del paciente, o de que no sintamos el correspondiente afecto, pero por fuera del hospital la gran mayoría tiene una vida por fuera del hospital en la que no se puede dejar así como así de un día para el otro el trabajo, el estudio, el cuidado de los niños, de la casa, etc.
Además, que también es muy probable que quien oficie de Acompañante de Enfermos no esté capacitado para desarrollar dicha función haciendo que igual en forma involuntaria, genere un efecto inverso en el paciente que no sea positivo para ninguno de los dos. Como por ejemplo hablar sin parar, o quedarse todo el tiempo callado, o trasmitirle los problemas personales, o enojarse cuando el enfermo nos reclama cosas sin sentido y muchas otras cosas más. En estos casos es altamente recomendable evaluar la posibilidad de contratar a un profesional o un técnico capacitado para poder desarrollar éste tipo de tareas de manera tal de que sepa exactamente qué es lo que necesita el paciente solucionando así todos los inconvenientes que mencionamos que se pueden generar por no estar preparados para cumplir estas tareas.
Conoce la empresa Alcance.com.uy , lider en servicio de Acompañamiento
Dejar una contestacion